Es habitual que a edades entre los 40 y 50 años nuestra visión llegue a padecer presbicia o vista cansada. La presbicia o vista cansada aparece de forma progresiva, ya que con el paso de los años el cristalino va perdiendo elasticidad y por lo tanto disminuye la capacidad que tiene de enfocar.

Pero gracias al uso de unas gafas progresivas la presbicia o la vista cansada no será un problema, ya que gracias a este tipo de cristales podrás cubrir todas las necesidades, incluso a la hora de conducir.

Es importante tener en cuenta que a la hora de conducir hay que tener una visión óptima que nos permita ver todo tipo de cosas, ya sea de cerca como de lejos. Es primordial saber a qué distancia se encuentran los otros vehículos, además de controlar las distancias de la carretera.

Una persona que padece presbicia o vista cansada, se habrá dado cuenta que a la hora de conducir surgen problemas como por ejemplo, no ver con claridad algún indicador de los marcadores del coche o del navegador o que los días donde hay tormenta o se conduce de noche, los reflejos de los otros coches lleguen a ser molestos e impiden una conducción segura ya que la visión no es nítida.

La solución para evitar este tipo de problemas que mejoran tu calidad de visión disminuyendo así la fatiga visual son unas gafas progresivas. Este tipo de gafas son muy cómodas para poder conducir y te permite ver todo tipo de distancias. Este tipo de gafas llevan unos cristales progresivos específicos para poder conducir, obteniendo una mejor área de visión más nítida y sin distorsiones. Además también ayudan a reducir los reflejos y deslumbramientos de otros coches y mejoran el contraste para situaciones con poca luz.

Si eres conductor y te han diagnosticado presbicia o vista cansada, no lo dudes y elige unas gafas progresivas. Con el tiempo te darás cuenta que son la mejor opción para el día a día y notaras una mejoría en el aspecto visual.