La mayoría de las enfermedades de la vista tienen como característica principal que son silenciosas. Debido a que la incomodidad o molestia que genera al principio siempre es leve, es común que pasen desapercibidas para los pacientes hasta que ya han alcanzado cierto nivel de complejidad.
Así mismo, existen patologías sistémicas asociadas a la vista, o enfermedades en las que la vista resulta también afectada o forma parte de los síntomas. De manera que es fundamental que cualquier persona que detecte alguna incomodidad o sensación extraña, acuda a un especialista y se asegure de que no se trata de un problema de salud importante.
Dentro de los trastornos visuales que afectan más frecuentemente a los seres humanos, se encuentran:
- Errores de refracción: Pueden producirse a causa de la longitud del globo ocular, la forma anormal de la córnea o el proceso de envejecimiento del cristalino. De este tipo de errores, los más conocidos incluyen la miopía, hiperopía, presbicia y astigmatismo. Usualmente, el primer síntoma incluye visión doble o borrosa.
- Cataratas: Es un trastorno común en personas mayores, sin embargo, no se descarta su existencia en la juventud. Una persona que padece esta enfermedad suele experimentar visión borrosa, resplandores, vista doble y otro signo de alarma es la necesidad de cambiar su receta médica con frecuencia, pues se trata de una condición que afecta a la lente del ojo, opacándolo.
- Degeneración macular: Es una enfermedad que afecta principalmente la visión central, que el ojo humano utiliza para ver con claridad objetos, leer o conducir. Se trata de una enfermedad que aparece en personas de edad avanzada, y afecta a la mácula. Puede ser húmeda, cuando crecen vasos sanguíneos anormales debajo de ella, que gotean sangre o líquido; o seca, cuando sus propias células sensibles a la luz se deterioran. En ambos casos el resultado es la pérdida de visión central.
- Conjuntivitis: Es una de las enfermedades más conocidas, pues seguramente todos conocemos a alguien que la haya padecido. Se refiere a la inflamación de la conjuntiva o membrana mucosa que cubre el ojo. Es común que se produzca por virus, bacterias, hongos, o por el uso de alérgenos. Generalmente, se presenta con enrojecimiento, comezón y secreción.
- Síndrome de ojo seco: Está caracterizado por la deficiencia en la producción de lágrimas, que ocasiona irritación, enrojecimiento y comezón. Se desarrolla progresivamente y la falta de lubricación en el ojo puede traer problemas crónicos y consecuencias como lesiones en permanentes en el ojo. Suele ser tratable y controlable.
- Glaucoma: Es una enfermedad que se caracteriza por la degeneración del nervio óptico, es una de las más graves, ya que a menudo resulta en la pérdida total de la visión. Lo peor acerca de esta condición es que no presenta sintomatología relevante hasta que está avanzada, por lo que su diagnóstico resulta complicado. Es una enfermedad con prevalencia en pacientes afectados por la diabetes.
¿Cómo tratar estas enfermedades y trastornos?
Algunos de estos trastornos o enfermedades son reversibles y fácilmente tratables, otros son más peligrosos, silenciosos y requieren un diagnóstico asertivo y tratamiento especial para evitar su avance y sus consecuencias en la visión.
De cualquier modo, lo más recomendable en este sentido, es prestar mucha atención a los síntomas, procurando el diagnóstico temprano de cualquier alteración; acudir al especialista con regularidad para chequeos y evitar colocar dentro de los ojos las manos sucias y otros objetos, como lentes de contacto o productos químicos sin supervisión médica. Prestar atención a tu salud y a tu vista puede evitar consecuencias a mediano y largo plazo.